4 min 10 seg

4 min y 10 segundos es lo que aconsejan los expertos que debe durar una ducha para un buen uso sostenible de agua y energía.

4 min y 10 segundos es lo que dura la sonrisa de la abuela cuando abre la puerta y de sorpresa te encuentra tras ella con el corazón en la mano y los brazos abiertos.

4 min y 10 segundos es lo que dura la llamada de mamá para saber cómo ha ido todo, para decirte que no le gusta el abrigo que te acabas de comprar o para saber dónde estás que Instagram se lo acaba de chivar.

4 min y 10 segundos es lo que tarda en hacerse mi pasta favorita, o lo que tardó el camarero en servírnosla en aquel italiano de la ciudad aquellos días de 30 grados a la sombra, cuando el cielo se moría de sed y la tormenta se dejaba ver.

4 min y 10 segundos es lo que tardan en acabarse las cervezas los domingos en La Latina con los amigos de siempre o con los que acaban de llegar.

4 min y 10 segundos es lo que dura mi canción favorita, lo que tardo en salir de la cama por las mañanas o en hacerse el café en esa cafetera de toda la vida que ya suena abatida.

4 min y 10 segundos es lo que tarda en llegar el metro todas las mañanas, lo que tardo en escribir buenos días a todos o en desenredar los cascos (bueno en esto tardo más).

4 min y 10 segundos es lo que tardo en separar la ropa blanca de la negra, en hacer la lista de la compra o en comprar el billete de ida, pero no el de vuelta.

4 min y 10 segundos es lo que tardo en perder el abono transporte todas las mañanas y en encontrarlo cuando ya me he sacado otro.

4 min y 10 segundos es lo que tardas en contarle a tus amigas eso que te acaba de pasar o en oír el problema que juntas tenéis que solucionar.

4 min y 10 segundos tardé en firmar el primer contrato laboral, en aprender de nóminas, días de vacaciones, reuniones o que el compañerismo es lo más importante en el trabajo.

4 min y 10 segundos tardé en darte un beso, perder contigo mi tiempo, guardar tus secretos o cuidar tus momentos.

4 min y 10 segundos es lo que tardo en hacer un storie y decidir si lo subo a mejores amigos o "palante", total que más da, aquí cada uno es como es.

4 min y 10 segundos es lo que dura una mirada desde la otra esquina con disimulo, pero intención cuando suena esa canción.

4 min y 10 segundos es lo que dura el brindis en cada reunión familiar entre risas, cantos, bailes y felicidad.

4 min y 10 segundos tarda el sol en desaparecer en el horizonte, en dejarnos a oscuras haciendo que tengamos que buscarnos con las manos o en rozarse nuestros labios.

4 min y 10 segundos es lo que tarda un avión en despegar, pero también en aterrizar.

4 min y 10 segundos es lo que tardo en ser autocrítica, aprender y lanzarme a por más.

4 min y 10 segundos es lo que duró un concierto, una mirada o un abrazo cuando hubo magia volatilizada.

4 min y 10 segundos es lo que tardo en hacer y deshacer la maleta. La ilusión ocupa poco y tampoco se arruga demasiado.

4 min y 10 segundos es lo que tardo en escribir este post, en cerrar el ordenador y en decirte a ti que me lees que te tires al barro y salgas a buscar otro atardecer, una cerveza, un libro, una película, o lo que más prefieras... que el tiempo apremia y no avisa ni te espera.


Cuatro minutos y diez segundos me fueron bastantes este año para reír, llorar, cantar, bailar, aprender, equivocarme, reorganizarme, querer, superarme y...